sábado, 23 de abril de 2011

Experiencias Cercanas a la muerte

Aquí, junto al teclado, tengo dos libros, aunque aun en buen estado global, sus páginas están amarillentas y sus portadas algo ajadas del uso, no en vano ambos libros rondan los 40 años y solo dios sabe por cuantas afortunadas manos han pasado antes que por las mías. Un libro que gozo de gran popularidad y en su época, a principios de los 70s, vendió millones de ejemplares y se tradujo a decenas de lenguas. Su escritor, por aquel entonces un medico doctorado en psiquiatría y filosofía y actualmente también graduado en psiquiatría forense que tras haber estudiado científicamente y recopilado centenares de casos publico el primer libro con el sugerente subtitulo: "El sorprendente <> que describe las experiencias de personas declaradas clínicamente <>...Descripciones tan coincidentes, tan vividas y tan positivas, capaces de cambiar para siempre las ideas sobre la vida, la muerte y la supervivencia del espíritu."

Estoy hablando, por supuesto, de Raymond Moody y sus libros "Vida después de la Vida" y "Reflexiones sobre vida después de la vida". Libros donde apareció por primera vez términos como "La luz al final del túnel o túnel de luz" "ECM: Experiencias cercanas a la muerte" "El ver tu vida pasar toda tu vida por delante de ti" ... Que se han quedado en el acerbo popular para siempre.


Sorprendentemente, casi 500 años antes de este libro el pintor Flamenco, del cual he hablado en más de una ocasion, Hyeronimus Van Acken "El Bosco" había pintado "Subida al Empíreo" un extraño cuadro que solo cobra sentido cuando se lee una de las múltiples descripciones que hay en estos libros sobre una ECM.

Pero. ¿Qué es una ECM?
Su nombre completo es Experiencia Cercana a la muerte y son percepciones del entorno narradas por personas cuando han estado a punto de morir o que han pasado por una muerte clínica y han sobrevivido. Hay numerosos testimonios, sobre todo desde el desarrollo de las técnicas de resucitación cardiaca, y según algunas estadísticas, podrían suceder aproximadamente a una de cada tres personas que superan una muerte clínica teniendo la mayoría de ella 9 fases o características en común que son las siguientes:

1. El paciente se siente flotar sobre su cuerpo, y desde arriba ve el dormitorio, el quirófano o el lugar en el que se encontraba (out-of body experiences, OBEs, experiencia extracorporal), e incluso oye la declaración de su propio fallecimiento.
2. Después, siente que se eleva y que atraviesa un oscuro túnel mediante una escalera o flotando en el vacío, y con una relativa rapidez.
3. Ve aparecer una figura al final del túnel (que suele describirse como hermosa, blanca o transparente; a veces hay paisajes, voces o música).
4. El paciente pasa a ser espectador, no siente dolor ni molestias: sólo percibe una paz interior.
5. Algunas personas, sin embargo, aseguran haber tenido experiencias terroríficas en el más allá.
6. Familiares o amigos difuntos van a su encuentro.
7. Aparece una presencia o voz que se define en función de las creencias religiosas del paciente (puede tratarse de Jesucristo, de un ángel, etc.), y se establece un diálogo sin palabras con ese ser que parece conocer todo sobre el moribundo.
8. Se presenta una visión global pero íntegra de lo vivido, como si viese “su película”.
9. El sujeto se ve delante de un obstáculo: una puerta o un muro y toma conciencia de que aún no ha muerto, y aunque sigue sintiendo una paz y tranquilidad indescriptibles y acogedoras, se da cuenta, y también eso le indican sus acompañantes, de que debe volver.

Un alto porcentaje de los pacientes también han reportado conocer situaciones ocurridas en el entorno del lugar lejos de su campo de visión o alcance cognitivo como en las cercanías del hospital, en la cafetería de este o en cualquier otro lugar e incluso conversaciones de los propios médicos cuando se encontraban ahi durante su estado de muerte clínica, todas ellas situaciones que posteriormente fueron contrastadas como ocurridas sin que haya explicación plausible mas allá de la que dan los propios testigos de que presenciaron la situación al salir de sus cuerpos.